viernes, 17 de noviembre de 2017

LECHUGA

Lechuga

Lechuga un alimento con múltiples propiedades y beneficios
Es esencial que sepamos la importancia que tiene la lechuga en función de nuestro organismo, ya que se puede considerar un  alimento con un sin fin de propiedades y beneficios.

La lechuga se cree que es originaria de Asia y actualmente es cultivada en todo el mundo, es una planta rica en betacaroteno, pectina, fibra, lactucina y  vitaminas como, A, E, C, B1, B2 y B3, siendo también rica en calcio, magnesio, potasio y sodio.

La lechuga es saciante, lo cual resulta especialmente beneficioso para personas que están haciendo dieta y que quieren adelgazar. El consumo de lechuga favorece la buena circulación de la sangre e incluso previene la formación de coágulos sanguíneos.

Entre las lechugas más comunes encontramos varios tipos.


Romana: tiene la hoja alargada y estrecha
Cogollo: son unas lechugas con el tallo muy pequeño
Hoja mantecosa: tiene una hoja muy ancha de color verde intenso con un tacto muy suave.
Trocadero: tiene unas hojas de un verde más pálido y éstas son blandas.
Hoja de roble: tiene hojas marrones y granates onduladas muy características.
Escarola: tiene los bordes dentados y rizados o lisos. La podemos encontrar principalmente en invierno


Beneficios que nos aporta la lechuga:

Contiene hierro, combatiendo y previniendo la fatiga, el cansancio y la anemia.
Se recomienda consumirla en estados gripales o resfríos, ya que fortalece las vías respiratorias.
Posee efectos sedantes y tranquilizantes, por lo tanto calma los nervios, alivia las palpitaciones y controla los problemas de insomnio.
Gran fuente de antioxidantes retrasa el envejecimiento celular, disminuye los niveles de colesterol, y activa la circulación previniendo la arterosclerosis.
En las personas diabéticas regula los niveles de azúcar en sangre.
Es importante consumirla en casos de retención de líquidos, infecciones urinarias, edemas y cálculos renales.
Posee efectos analgésico tiene un efecto calmante en dolores musculares, torceduras o golpes.

Algunos tratamientos en los que podemos utilizar la lechuga.

Para combatir el insomnio: Debido a las propiedades sedantes que tienen las hojas de esta planta. Hervir hojas de lechuga  y cascara de naranja en el medio litro de agua durante 10 minutos. Es necesario que la infusión repose unos 5 minutos. Se recomienda consumir una taza antes de acostarse.

Para tratar el acné: Lavar muy bien las hojas de una lechuga y dejarlas remojar en agua durante 5 minutos. Después  debemos triturar las hojas en una licuadora. Aplicamos la pasta en la zona a tratar. Se recomienda mantener esta pasta de durante 20 minutos en la zona afectada.

Para calmar el dolor reumático: Aplicar hojas de lechugas, previamente hervidas y aun calientes, sobre la zona afectada a modo de cataplasmas.

Para la acidez estomacal: Licuar un cuarto de una lechuga en un vaso de agua (300 mililitros) hasta obtener una especie de puré, el cual se bebe

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